martes, enero 04, 2005

Torrente Ballester deja El Tabaco

A solas con los dedos sin oficio
ni trato con papeles
ni petaca
ni fósforos
se eternizan las tardes del invierno.
Las escenas suceden
tediosas
saturadas
sin ceremonia alguna que las paute.
No hay treguas en el tiempo
que pasa dilatado
sin acotar su márgenes
con el ensueño azul de la humareda.
Solo queda -infinita- la nostalgia
por no tener las manos ocupadas
en derrotar la vida alegremente
tras el espolio gris de la ceniza
y un difuso recuerdo de otras tardes
cargadas de licor y confidencias
a la sombra rojiza de la brasa.

de "Concierto cuidado"
Paco Novelty

1 Comments:

At 11:34 p. m., Blogger Manolo said...

Yo noto por una parte que el alcohol me afecta menos y por otra que me sobra algo más de dinero. Lo malo es que esos euros sobrantes me los gasto en cerveza. Al final sacrifico el hígado por los pulmones.

Me pasa lo mismo que a tí con las cosas que tomo. El fumar y el beber están muy unidos. A menudo me engaño un poco a mí mismo y me fumo una sisha o algún porro, que seguro que no cuentan como tabaco. Es complicado dejar de echar humo para siempre.

Saludos.

Manolo.

 

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