Otro día de Navidad. Van cuatro desde que mi abuelo murió. Si se supone que los santos del calendario se celebran conmemorando el día de su muerte, no sería sacrílego (siendo ateo) celebrar a mi abuelo en el día de Navidad. Dadas sus creencias, no creo que le gustase suplantar al mismísimo Dios en su cumpleaños. Por otra parte, si Dios fuese como lo imaginaba mi abuelo, no creo que le importase mi pequeña herejía.
En otro orden de cosas, he vuelto a hablar con Guillermo. Me hacía falta.
2 Comments:
¿Ya no hay más Post, después del 2009?
Me gusta mucho este blog, lo he descubierto hoy circunstancialmente, siento Sr. Sirgado que esto no siga
Saludos
Jestepario
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